Del 12 al 15 de octubre se realizará en Sumaré (San Pablo) el 3° Congreso de la CSP-Conlutas, con más de 2.000 delegados electos en más de 500 asambleas de base de norte a sur del Brasil. El congreso debatirá la situación del país y del mundo y las tareas y desafíos para los trabajadores.

Por: Atnágoras Lopes, de la Secretaría Ejecutiva Nacional de la CSP-Conlutas, 9/10/2017

También se discutirá el proyecto de la CSP-Conlutas. Será un congreso vivo y democrático. Tendrán lugar varias y diferentes opiniones, y cabrá a la base decidir los próximos pasos. Las contribuciones y propuestas de resoluciones que serán votadas están disponibles en el site de la CSP-Conlutas.

La CSP-Conlutas es una conquista en el terreno de la organización, de la independencia de clase, de la democracia obrera, de la combatividad y de la acción directa de los trabajadores y sectores populares en el Brasil. Por eso, ha cumplido un papel significativo en la lucha de los trabajadores.

Papel decisivo en la batalla por la unidad de acción para luchar

El papel de la CSP-Conlutas ha sido fundamental e incluso decisivo en varios momentos para construir y garantizar la más amplia unidad de acción para luchar y derribar los obstáculos para poner en marcha la acción directa y unificada de la clase y de los sectores populares.

Fue así en la articulación de la huelga nacional de los metalúrgicos en 2016 y en el proceso que originó la jornada de luchas del primer semestre de 2017 contra las reformas, abriendo camino para que la base impusiese, el 15 de marzo, un fuerte día de movilizaciones y paralizaciones y fuese una palanca para la Huelga General del 28 de abril.

Tuvo también un papel destacado en la manifestación del 24 de mayo en Brasilia. Denunció el desmonte de la huelga general que estaba marcada para el 30 de junio, por las cúpulas de las principales centrales sindicales, por el PT, por Solidariedade, por el PCdoB, por el Frente Brasil Popular [FBP], por el Frente Pueblo Sin Miedo [FPSM] y por el Frente Amplio por las Directas, que trabajaron enfocadas en las elecciones de 2018.

Nuestra central aún es minoritaria, pero ha cumplido un papel de primera línea en la búsqueda por retomar la más amplia unidad de acción para luchar, a partir de la unificación de los sindicatos de los metalúrgicos de todas las centrales. El Encuentro de Luchadores del 29 de setiembre planteó el 10 de noviembre como día unificado de luchas, nuevamente sorteando obstáculos y abriendo caminos para luchar, por la base, por la huelga general para derribar el gobierno y las reformas.

Eso demuestra que la central ha estado presente en las luchas, buscando unir al conjunto de la clase trabajadora, sin perder su autonomía, ligada a los procesos reales y junto con la clase en lucha. El balance de la central en el último período es de una lección de unidad y enfrentamiento.

Defender el carácter original y de independencia de clase de la CSP-Conlutas

Las principales polémicas se dan alrededor de la evaluación del momento por el cual pasa el Brasil y el mundo, principalmente sobre las orientaciones, prioridades y carácter de la central.

La fuerza y la disposición de lucha de los trabajadores

A diferencia de la mayoría de las centrales burocráticas que arrojan la culpa sobre los trabajadores por la falta de disposición para luchar y en la fuerza del gobierno Temer, que tiene apenas 3% de popularidad, la CSP-Conlutas defiende que el problema está en las direcciones y que es necesario seguir apostando en las movilizaciones.

Ese debate debe ser parte del congreso, pues hay sectores que defienden que los trabajadores y las luchas están a la defensiva. Ese debate ya fue planteado al interior de la central cuando una parte pequeña defendió que la Huelga General del 28 de abril era imposible debido a la falta de disposición de los trabajadores para luchar.

Contrariando sus previsiones, la clase trabajadora hizo tal vez la huelga general más fuerte de su historia. Y la central tuvo un papel decisivo en ese llamado.

Luego de la traición de las cúpulas de las centrales el día 30 de junio, y de la operación de desmonte de FBP, FPSM, PT y Cía, se dio la aprobación de la reforma laboral en el Congreso, y Temer ganó una sobrevida comprando diputados. Nuevamente, esa discusión va a reaparecer, y el Congreso va a tener que discutir: ¿fue culpa de la base o de las cúpulas que no hubiera huelga general el 30 de junio?

También es equivocado creer que cuando los capitalistas nos sacan una conquista eso implica siempre en menor disposición de lucha por parte de los trabajadores. Desde 2013 hacia acá, hay más luchas de la clase trabajadora, de los sectores populares y de la juventud. Tenemos hoy el mayor número de huelgas desde el auge de los años de 1980 y tuvimos este año la primera Huelga General desde 1989. Hay, eso sí, una polarización de la lucha de clases, porque hay crisis capitalista.

El problema de la clase trabajadora no está en la falta de disposición de lucha. Esta en la mayoría de sus direcciones, que están atadas a los capitalistas, defienden la institucionalidad que está ahí y tienen como prioridad las elecciones.

Independencia de clase

Este es uno de los pilares históricos de la CSP-Conlutas, que permitió que la central fuese capaz de enfrentar el gobierno burgués de colaboración de clases de Lula y Dilma, y ahora, de manera coherente, el gobierno Temer. Es fundamental mantener la lucha contra los bloques burgueses (PMDB/PSDB/DEM/Bolsonaro, pero también contra el bloque del PT con los demás burgueses), independientemente de quien está en el poder central o en la oposición. No hay un bloque burgués progresivo.

El PT, ahora en la oposición en nivel federal, continúa formando un bloque burgués comprometido con el crecimiento económico capitalista y mantiene organizaciones sindicales y movimientos sociales a remolque de ese proyecto. El FBP, el Frente Amplio por las Directas, el FPSM y la reciente plataforma Vamos están todas articuladas alrededor de un proyecto electoral y de colaboración de clases, capitaneado por el PT y por Lula.

Desde nuestro punto de vista, debemos construir una amplia unidad para luchar. Ese es el camino para derrotar los ataques de la burguesía y, en ese proceso, avanzar en la organización por la base en dirección hacia el poder popular. No vamos a derrotar los ataques del gobierno por las elecciones y sería un retroceso diluir la CSP-Conlutas en el interior de iniciativas de colaboración de clases con prioridad electoral.

Para movilizar, hacer acciones unificadas y huelga general, debemos hacer la más amplia unidad de acción, como hemos procurado construir. La CSP-Conlutas debe seguir manteniendo su vocación original, de amplia unidad para luchar, pero de mantenimiento de un polo de independencia de clase para presentar y construir, en la acción directa, una alternativa obrera y socialista para la crisis del país.

Profundizar el carácter obrero, sindical y popular

Este tal vez haya sido el mayor y más osado acierto en la conformación de la CSP-Conlutas. La lucha estratégica por la revolución socialista en el Brasil exige fijar profundamente los pies en la clase obrera, organizar a los demás sectores de la clase trabajadora y el enorme sector popular de la ciudad y del campo. El avance de la CSP-Conlutas en el aglutinamiento y en la organización de los sectores obreros y de los sectores más pobres y oprimidos es un avance que debe ser profundizado.

Construir la CSP-Conlutas también en esos espacios, haciendo la central más obrera, negra y popular, es estratégico. Organizar a los de abajo para derribar a los de arriba, transformar la sociedad y conquistar el socialismo: esa es nuestra meta.

La democracia obrera

La CSP-Conlutas tiene una virtud, que es ser dirigida por sus instancias de deliberación (apoyadas en los delegados de base, en las entidades del movimiento y su representación de base), en que la más importante es el congreso, a partir de la aplicación de la democracia obrera y no por acuerdo o consenso entre corrientes políticas. El consenso como método de funcionamiento significa, en la práctica, una dictadura de la minoría sobre la mayoría.

Plan de acción – Construir el 10 de noviembre rumbo a la huelga general

Un punto alto del congreso debe ser la deliberación del Plan de Acción que, seguramente, será un importante impulso para construir por la base un fuerte 10 de noviembre.

Buscar construir por la base una nueva palanca que recoloque la huelga general en el orden del día.

100 Años – Revolución Rusa es tema del Congreso

Habrá un panel central que debatirá el tema el viernes 13 de octubre, a las 10 horas. Además, diversas agrupaciones presentarán materiales y actividades en los intervalos.

La LIT-CI y el PSTU presentarán un documental sobre la Revolución Rusa.

Internacionalismo – Encuentro Internacional después del Congreso

Los días 16 y 17 de octubre se hará el Primer Encuentro de la Clase Trabajadora de las Américas, en San Pablo, impulsado por la Red Sindical Internacional de Solidaridad y Luchas.

El objetivo es organizar la lucha de los trabajadores del continente contra los ataques del imperialismo y del capitalismo, incluyendo los Estados Unidos, y fortalecer la Red.

Estarán presentes representantes de por lo menos diez países, además de representantes de varios países de África y también de Medio Oriente.

Confiera

En el site del Congreso usted puede encontrar la programación, las diversas propuestas de contribuciones y resoluciones, y otras informaciones: http://cspconlutas.org.br/congresso/

Traducción: Natalia Estrada.