Entrevistamos a Tania Mercader, que fue la principal dirigente de la histórica lucha de las trabajadoras de Jaeger Ibérica. Tania es militante de Corriente Roja

Pregunta: ¿Qué es para ti el 8 de marzo?

Tania: El 8 de marzo es el día internacional de la mujer trabajadora y eso no ha cambiado por más que haya quienes quieren quitarle el contenido de clase. La mujer obrera y trabajadora no tenemos las mismas reivindicaciones que las burguesas, unas luchamos por sobrevivir, con unos salarios de miseria, llevando dos jornadas dentro y fuera de la casa. Las  burguesas, desde sus puestos directivos nos explotan. Aparte de ser mujeres y que unas y otras  somos oprimidas, no tenemos nada en común.

Pregunta: Hemos leído las siguientes declaraciones de una dirigente feminista: “Nosotras llamamos a la huelga a todas las mujeres desde la interseccionalidad, es decir, a mujeres, bolleras y trans, no a más gente. ¿Cuál es el papel de los hombres? Cubrir los servicios mínimos. Van a tener que ir al trabajo igualmente. Porque nosotras no vamos a valorar el éxito de la huelga si se paralizan tantas fábricas” . ¿Qué nos puedes decir al respecto?

Tania: Que la huelga en unos de los métodos que tiene la clase obrera para defenderse de la patronal y los gobiernos, un arma clave para conseguir las reivindicaciones. Antes la discriminación y las agresiones que estamos padeciendo las mujeres, es necesaria una huelga del conjunto de la clase obrera, mujeres y hombres. Bajo ningún concepto debemos enfrentar mujeres trabajadoras y hombres trabajadores. Esta lucha es del conjunto de la clase trabajadora. No  dividimos ni excluimos a los compañeros. Otra cosa es que algunos no la secunden y tengamos que tirar solas.

Pregunta: ¿Qué les dirías a las mujeres trabajadoras de hoy?

Tania: Que tienen que luchar por sus derechos tanto laborales como de sociales y que nadie les va a regalar nada. La discriminación  salarial en Jaeger Ibérica en el año 1983 era de un 14%. Hoy, en el año 2018, en España hay una brecha salarial del 24%. La historia nos dice que lo que no avanza retrocede.

 

La lucha de Jaeger Ibérica: un hito en el combate por la igualdad salarial de las mujeres trabajadoras

Las obreras de Jaeger Ibérica hoy Magneti Marelli (Barberà del Vallès) marcaron entre 1982 y 1989 un verdadero hito en la lucha de la mujer trabajadora contra la discriminación salarial.

Fue una batalla larga e intensa, apoyada en la asamblea de trabajadores, que incluyó huelgas intermitentes, huelgas indefinidas, manifestaciones y hasta una marcha masiva a Madrid para presionar al Ministerio de Trabajo y al Poder Judicial. Las trabajadoras buscaron la solidaridad  de otras factorías de la multinacional Fiat, la de otras empresas y sectores populares. Presionaron a Ayuntamientos y a parlamentarios, de Cataluña y del Estado español, y hasta al Defensor del Pueblo, para ganar a la opinión pública. Utilizaron a fondo los recursos judiciales, consiguiendo hasta cuatro sentencias favorables antes poder cantar victoria.

La batalla se ganó por la tenacidad de las 309 mujeres de la plantilla que, queriendo ir juntas con los compañeros de la fábrica, se quedaron solas en la huelga indefinida de abril y mayo de 1989.

A lo largo de una batalla de más de 7 años, las compañeras sabían bien su lucha iba mucho más allá del convenio. Sabían que estaban enfrentando un grave problema social en el que solo uniendo a los trabajadores hombres y trabajadoras mujeres, buscando la más amplia solidaridad de clase y convirtiendo su reivindicación en un problema social y político, podrían vencer. Así fue y el 8 de mayo de 1989, tras 27 días de huelga, consiguieron finalmente la victoria: cobrar igual que sus compañeros hombres. El triunfo no sólo fue suyo, lo fue de todas las mujeres trabajadoras y de toda la clase obrera y abrió una puerta a otras trabajadoras para luchar en sus empresas en mejores condiciones por los cambios que se dieron en la legislación.