Un problema que nos afecta a todos/as

En el estado español hay 8.595.509 personas (1/11/2016) que perciben una pensión, por incapacidad permanente, jubilación, orfandad, viudedad… Con el estallido de la crisis económica, oficialmente (junio 2016), el 34,3% de los hogares viven con el ingreso de una pensión. Se trata pues de un problema de enorme repercusión social que afecta no solo a los/as pensionistas sino a los millones de personas que la crisis ha dejado la pensión como única fuente de ingreso para toda la familia.

 

Mi pensión me la pagué yo, tú estás pagando la tuya

Dicen que los trabajadores/as en activo son los que están pagando las pensiones de los actuales pensionistas. Ese argumento es una falsedad que persigue enfrentar a los/as pensionistas con el resto de trabajadores/as. Con tu trabajo te estás pagando tu pensión, la de los pensionistas se la han pagado ellos/as durante muchos años de trabajo y sacrificio.

 

Te afecta desde el primer día de tu vida laboral

A los trabajadores/as más jóvenes se les pretende hacer creer que esto de las pensiones les afectará “solo” a muy largo plazo, cuando dentro de muchos años se jubilen. Este argumento esconde que el salario de cualquier trabajador/a, desde el primer día que se incorpora a la actividad laboral, se compone de varias partes: el salario directo, el que percibe liquido cada mes, el indirecto, el que se recibe en forma de sanidad, educación… y el diferido, el que se acumula para cuando se jubile o por accidente o enfermedad no pueda seguir trabajando. Por tanto lo que suceda con la jubilación te afecta desde el primer día que trabajas.

 

¿Con la crisis no hay dinero para las pensiones?

Este argumento contiene dos falsedades. La primera, es que el intento de acabar con las pensiones públicas viene de mucho antes que estallara la crisis. La segunda, es ¿por qué si hay dinero para las “ayudas” millonarias a los banqueros, para mantener la Casa real, para gastos militares o para mantener sueldos de privilegio a los  parlamentarios, cargos públicos… y no para las pensiones? Tienen dinero para pagar una deuda que los trabajadores y el pueblo no contrajimos, pero no hay para pensiones.

 

Los que hacen el negocio

Del deterioro y recortes de las pensiones públicas los principales beneficiarios son los “fondos privados de pensiones”, detrás de los cuales están banqueros y especuladores. Este negocio acumulaba, a finales de Septiembre, 104.580 millones de euros. El negocio reside para los capitalistas en que esos fondos son una fórmula de “capitalización del ahorro”, sortean con esos capitales las dificultades del crédito en épocas de crisis y utilizan esos capitales para las privatizaciones en otras empresas o sectores. Y además montan empresas de gestión de los fondos que, por ejemplo, les hicieron embolsarse 1.830 millones de euros en comisiones en los 9 primeros meses del año en curso. Lamentablemente, sindicatos como CCOO y UGT forman parte de esas empresas de gestión de los fondos.

 

Pensiones a cargo de los Presupuestos Generales del Estado

Durante años la clase obrera luchamos para conquistar el derecho a una pensión digna. Desde 1967 las pensiones estaban garantizadas por los Presupuestos Generales del Estado. Los Pactos de Toledo (1995) firmados por patronal, gobierno, partidos parlamentarios y CCOO y UGT, separaron las fuentes de financiación de los diversos tipos de pensiones, eximiendo así al Estado de esta obligación básica; abrieron las puertas al negocio de las pensiones privadas y además ampliaron el periodo de cálculo de las pensiones pasando de 8 a 15 años. Garantizar las pensiones, que son un derecho elemental, exige empezar porque el pago de todas ellas forme parte de los Presupuestos Generales del Estado.