El pasado 25 de Enero recibimos con indignación la noticia de que el compañero Antonio Garrido fue DESPEDIDO bajo la absurda argumentación de errores en el protocolo de atendimiento de llamadas. El verdadero motivo de esta desproporcionada actitud de la dirección de la empresa PROAZIMUT no es otro que REPRIMIR a quien lleva años ejerciendo una importante labor sindical en defensa de los derechos laborales de sus compañeros/as. Garrido formó parte del Comité de Empresa por CCOO durante los años 2010-2014, se presentó en 2014 a las elecciones sindicales encabezando la lista del sindicato COBAS y ha continuado en todo momento al pie del cañón ejerciendo actividad sindical.Por Juan Parodi

Una vez más PROAZIMUT S.L (Centro Especial de Empleo) hace gala de una política empresarial lamentable, con el objetivo de eliminar la resistencia de todo aquel/la que intente oponerse a sus planes, incluso arrebatando cuando es necesario hasta su única forma de sustento a un trabajador con discapacidad y una larga trayectoria de servicio en la empresa de casi nueve años.

Este hecho supone una seria agresión contra el conjunto de la plantilla. Cualquier ataque o discriminación hacia un/a trabajador/a debe ser contestado y arropado de solidaridad, pero cuando se trata de represión de la empresa hacia la actividad sindical es preciso redoblar la respuesta colectiva. Permitirle a PROAZIMUT un abuso de este calado equivaldría a renunciar a la defensa de los derechos colectivos de la plantilla y dejaría a la dirección de la empresa en una posición de omnipotencia desde la que, sin lugar a dudas, aprovechará para avanzar en los recortes hacia el conjunto de los trabajadores/as con además una permanente amenaza sobre quien se atreva a levantarse o quejarse frente a cualquier medida injusta de la empresa.

Además, este intento intimidatorio por parte de PROAZIMUT pretende amedrentar a los propios representantes sindicales de los trabajadores/as advirtiéndoles que si no acatan con sumisión las directrices de la dirección de la empresa, en el momento que dejen de tener inmunidad sindical irán igualmente a la calle.

Evidentemente un atropello tan descarado y fácil de probar como éste tiene un claro encaminamiento por la vía jurídica –lo cual ya está hecho. Sin embargo, es fundamental construir una respuesta colectiva desde el conjunto de la plantilla y con el comité de empresa a la cabeza y demostrarle a esta dirección represora que estos/as trabajadores/as ni miran para otro lado ni bajan las orejas cuando se les intenta pisotear. En primer lugar se trata de firmar de forma masiva el comunicado que está moviendo el comité para exigir la readmisión de Garrido y asistir a las convocatorias que se realizarán al respecto. Por otro lado, parte de la defensa del compañero tiene que pasar por dirigirnos con contundencia a la opinión pública y a la propia Junta de Andalucía para poner en evidencia a PROAZIMUT y a su política represiva, ya que es inaceptable una empresa que se beneficia de subvenciones y contratos públicos para realizar una actividad social y al mismo tiempo ejecuta una política antisocial hacia sus trabajadores/as.

Desde aquí le advertimos a la dirección de la empresa para que revise su actitud y dé marcha atrás con el despido, ya que su actitud irresponsable va a tener consecuencias negativas, no solo para ella, sino para los usuarios de este servicio que desde luego no tienen culpa de nada ni condiciones para poder permitirse verse afectados. Los/as trabajadores/as de PROAZIMUT, como en cualquier empresa, no tenemos más intención que cumplir con nuestras funciones de forma responsable y profesional, por lo que exigimos a la dirección que se dedique a dirigir y gestionar, que nosotros/as nos dedicaremos a trabajar; ya que si la empresa a lo que se dedica es a reprimir, nosotros/as nos veremos obligados/as a dedicarnos a responder.

  • CONTRA EL ATAQUE DE PROAZIMUT A LOS DERECHOS SINDICALES!
  • CONTRA LA AGRESIÓN DE LA EMPRESA AL CONJUNTO DE LA PLANTILLA!
  • POR LA READMISIÓN INMEDIATA DE ANTONIO GARRIDO!