Sexto día de movilización, 8 de octubre Se ratifica la huelga general, el paro del pueblo y el levantamiento popular para hoy, 9 de octubre. Se mantienen las vías intercantonales cerradas en todo el país, Quito está totalmente paralizado; Guayaquil, bastión de la derecha, se encuentra convulsionado; en Cuenca se han convocado movilizaciones. En la región amazónica el movimiento indígena ha hecho una toma simbólica de la gobernación de Pastaza. Lo mismo se intentó en Macas. También se han tomado la estación de bombeo de YURALPA, bloque 28.

En Quito las protestas continuaron en los alrededores de la Asamblea Nacional (parlamento) del Ecuador. La CONAIE fue la protagonista de esta jornada. Cabe resaltar la solidaridad que el movimiento indígena ha recibido de gran parte de la población de Quito. Las personas se acercan a los sitios de acopio y alojamiento, principalmente universidades, a entregar sus muestras de solidaridad con la lucha.

No obstante, el nivel de represión ha aumentado drásticamente. Se ha allanado las instalaciones de la radio “Pichincha Universal” por el presunto delito de «incitación a la discordia entre ciudadanos». El gobierno decretó el “toque de queda” que impide que las personas se movilicen en el horario de 20:00 a 05:00, de lunes a domingo, cerca de las “edificaciones e instalaciones estratégicas” definidas por el Ejército.

Con esta medida, en la tarde y noche del 8 de octubre se reprimió brutalmente a los manifestantes quiteños, sobre todo a miles de niños, mujeres, ancianos y hombres indígenas, muchos de los cuales fueron sitiados en el coliseo de la Casa de la Cultura Ecuatoriana. Es difícil encontrar los datos del número de muertos y heridos. De acuerdo a organizaciones de Derechos Humanos se reporta que “cerca de 63 manifestantes detenidos en la Asamblea Nacional fueron trasladados ilegalmente al cuartel de policía del GIR de Pomasqui donde se presume posibles casos de tortura”.

Así, con la implementación del terror, el gobierno de Lenin Moreno pretende doblegar al movimiento indígena instalado en Quito. Situación similar se pretende con los manifestantes en Guayaquil, nueva sede del gobierno, donde los caudillos de la peor derecha ecuatoriana: Jaime Nebot, Cintia Viteri y Guillermo Lasso, que son el principal sostén del gobierno y de sus medidas antipopulares, han bloqueado el ingreso a la ciudad con maquinaria pesada reprimiendo duramente a los campesinos que intentaron ingresar a la ciudad. Esta burguesía trata de deslegitimar la lucha y está llamando a una contramarcha para “defender” la ciudad de Guayaquil de los “delincuentes”, “demagogos”, “populistas”, “anarquistas” y “agitadores a sueldo”, con el discurso de la defensa de la “libertad”, la “democracia” y el “progreso”.

Sin embargo, el movimiento indígena ha declarado: “La CONAIE ratifica la permanencia de la movilización nacional contra las medidas económicas, el rechazo al extractivismo y la defensa de los territorios, nuestras bases están organizadas y con la agenda de lucha clara, la concentración en Quito constituye una medida de presión de una parte de nuestra estructura ya que las acciones locales y provinciales se mantienen a la espera de nuevas estrategias de lucha.” Así también las organizaciones del Frente Unitario de Trabajadores, el Parlamento Laboral, LA CUTCOP, y otras organizaciones, ratificaron la movilización nacional.

Desde el MAS estamos llamando a unir fuerzas en torno a la CONAIE y a las organizaciones de los trabajadores para derrotar el paquetazo que nos sumirá en más miseria y desocupación.

También llamamos a organizar asambleas de coordinación de los sectores en lucha, comités de autodefensa, tanto en el centro como en los barrios, para doblegar a los delincuentes y a los infiltrados policiales del gobierno, del correismo y de la ultraderecha enquistados en las movilizaciones. Para esto, apoyamos el uso de la “justicia indígena” contra estos elementos.

¡Abajo las medidas económicas! ¡Abajo el paquetazo! ¡Fuera el FMI! ¡Abajo la represión! ¡Libertad para los presos políticos! ¡Abajo el estado de excepción y el toque de queda! ¡Unidad en torno a la CONAIE y los trabajadores! ¡Comités de autodefensa para doblegar a los infiltrados y delincuentes!