A 11 meses de la declaración de la pandemia de la Covid-19, la tercera ola está incrementando la presión hospitalaria hasta límites de desborde, porque tras las navidades los contagios se han disparado. Todas las CCAA, y otros estados europeos, están adoptando de nuevo medidas restrictivas, anunciando nuevos confinamientos, perimetrales en principio, y algunos ya piden domiciliarios.

Hace 11 meses, cuando la OMS declaró la pandemia por Covid, medio mundo se paralizó; se confinaron países, se cerraron centros de trabajo (a veces, por la exigencia de los propios trabajadores y trabajadoras), etc… Nadie sabía a qué nos enfrentábamos, el virus era un enemigo desconocido. Además, los servicios sanitarios públicos de todo el mundo o bien no existían como los EEUU, o estaban bajo mínimos, en Europa. En el Estado Español llevábamos dos gobiernos, el del PSOE (ZP) y el del PP (Rajoy) que no habían hecho otra cosa que recortarlos al servicio de su privatización y/o desmantelamiento, por «indicación» de la Unión Europea.

Pero eso fue hace 11 meses… ¿Qué han hecho los gobiernos en estos 11 meses, salvo darle una pasta a las farmacéuticas para que investiguen en una vacuna que están poniendo con cuenta gotas? No es admisible que las únicas medidas vuelvan a ser de restricción de la vida social (mientras no hay ningún problema para ir al trabajo, ¿es que no nos infectamos en la oficina o en el transporte público abarrotado?)

Veamos. Ahora hay varias vacunas distintas, la de Pfizer, la de Moderna, dos chinas, una rusa y una cubana. ¡Que vacunen YA a la población!

En estos 11 meses no han hecho absolutamente nada para prevenir la «presión hospitalaria». No han contratado personal, no han tocado la sanidad privada, no han adquirido medios (UCIs)… En el Estado Español solo han hecho ese almacén para enfermos que se llama «hospital» Enfermera Isabel Zendal. ¡Nada más!

Perdón, sí han hecho algo, han acordado un plan de rescate para las grandes empresas y para la transformación de la economía, de 750.000 millones de euros en toda Europa (140.000 para el Estado Español); pero con condiciones, y una de ellas es la de que no se puede invertir en fortalecer los sistemas sanitarios (además de que no pueda usarlo para pagar las pensiones o los intereses de la deuda pública). Para esto sí tienen prisa y dinero (el decreto se aprobó el 30/12 del 2020)

Mientras asignan millones de dinero público a las grandes empresas para reformarse, la población sigue con el mismo sistema sanitario que hace 11 meses. Confinan a la población, pero ellos, los capitalistas y sus gobiernos, no se confinan para nada; siguen aprobando decretos y leyes sin que nadie pueda salir a la calle para responderles.
Tras 11 meses de pandemia, el gobierno central y los distintos gobiernos autonómicos han sido incapaces de tomar medidas para evitar esta nueva ola de contagios. Debemos seguir exigiendo un plan de choque sociosanitario para enfrentar la Covid-19 y la crisis, y la única forma de imponerlo es movilizándonos.