Una silenciosa declaración de guerra contra las condiciones de vida de la clase trabajadora

Las Elecciones Municipales del próximo 28 de mayo y, sobre todo, el escenario político y económico resultan un tanto controvertidos si tomamos en consideración el diagnóstico del propio gobierno PSOE-Unidas Podemos. Hablando sobre el progreso que han supuesto sus políticas, crean un mundo tan ficticio que lo único que genera es desconcierto, abatimiento y descorazonamiento entre sectores de la clase trabajadora, al mismo tiempo que contribuye a fortalecer el espacio y discurso reaccionario de PP y VOX.

La realidad para la clase trabajadora dista bastante de la visión de Moncloa, con una inflación desatada que devora el poder adquisitivo de los salarios o las pensiones de miseria. De hecho la OCDE reconoció que solo en el 2022 el salario real en relación a la inflación bajó un 5,3 %, lo que representa una catástrofe para millones de familia obreras, teniendo que apretarse para poder llegar a final de mes.

Desde Moncloa tratan de justificar el encarecimiento de la vida y el consiguiente empobrecimiento de millones de familias a partir de la guerra de Ucrania, lo que resulta una tomadura de pelo, si miramos los beneficios multimillonarios de la Banca (22.849), empresas energéticas (19.000) y grandes supermercados (75.000).

En este escenario de salarios de miseria, de precariedad, de facturones de la luz y alimentos y alquileres desorbitados para l@s trabajador@s, sigue persistiendo de fondo la crisis económica que se originó en 2008 y de la que los capitalistas aún no han conseguido reponerse.

La comarca obrera de la vega del Guadalquivir: la catástrofe que nos amenaza y cómo combatirla

La situación en la comarca, al igual que el resto de comarcas agrarias, es más precaria todavía. Si bien ya veníamos mal, debido a la desindustrialización impuesta por Alemania y Francia a raíz de la entrada en la UE, ahora la crisis ambiental generada por el sistema de producción capitalista amenaza la existencia del sector agrario. No se trata de pronósticos, sino de una realidad que ya estamos viviendo miles de familias trabajadoras.

La amenaza que se cierne sobre el futuro de los pueblos, el sector agrario y trabajador@s, muestra al mismo tiempo la esencia de un modelo de país basado en el sector servicios y camarer@s. Así, mientras los gobiernos ya anuncian cortes y restricciones de agua para las familias y el campo, se muestran permisivos con los campos de golf (un campo de golf de 18 hoyos consume el equivalente a una población de entre 10.000 y 15.000 habitantes).

Hace tan solo tres años, una de las campañas más importantes como es la recolección de naranja comenzaba en el mes de septiembre y finalizaba normalmente en junio. Sin embargo, ahora la campaña dura, como mucho, 7 meses. Del mismo modo, antes una campaña en una fábrica era de cuatro meses, pero ahora nos encontramos campañas de un mes o 15 días. Por no hablar del problema de la vivienda, el desempleo y precariedad de la juventud o el deterioro y privatización de los Servicios Públicos.

Se trata del preludio de un verdadero drama para miles de familias y la juventud, donde la única salida que ofrecen estos gobiernos es la de trabajar de camarer@ o coger las maletas y emigrar como nuestros abuelos.

Una de las cuestiones que más está dando de qué hablar es Doñana, y no es para menos, pues se trata de un espacio único y muy importante para la biodiversidad, que está completamente devastado y cada vez más seco por culpa de los regadíos ilegales que los distintos gobiernos de PSOE y PP han permitido, y que ahora Moreno Bonilla quiere legalizar.

Doñana se va a convertir en uno de los temas centrales en todas las campañas electorales (la campaña electoral para las Generales ya ha empezado en la práctica), y hay que denunciar que si el PSOE se está abanderando de la defensa de Doñana es porque la Unión Europea ha amenazado con retirar los fondos.

No solo eso, sino que la solución que propone el PSOE es comprar con dinero público a esos terratenientes sus cultivos, premiándolos por su delito, regadío ilegal para tener contentos a ambos, terratenientes y UE.

Es imprescindible que desde todos los ayuntamientos se haga presión y empiecen por exigir el cierre de todos los pozos y regadíos ilegales y que se cree un gran movimiento vecinal en defensa de Doñana y los espacios naturales, que ponga el agua al servicio del pueblo y no del capital privado.

Súmate y construye con nosotros las candidatura Corriente Roja en Alcalá del Río y Tocina-Los Rosales

Frente a esta realidad social que estamos viviendo la clase trabajadora tenemos dos caminos. El primero es aceptar la resignación y el abatimiento de que no se puede cambiar nada mas allá de las medidas cosméticas del gobierno de PSOE- UP, mientras seguimos apretándonos más y más. El otro es levantarnos y rebelarnos frente a esta situación, imponiendo un verdadero plan de emergencia social para la clase trabajadora y para los sectores populares. Para buscar ejemplos no hace falta irse lejos, basta con dirigir la mirada a Europa y especialmente a Francia, para ver el pulso que mantienen l@s trabajador@s en defensa de sus derechos.

Es por esta razón por la que Corriente Roja nos postulamos en estas Elecciones Municipales, para visibilizar la realidad que viven millones de familias trabajadoras, para mostrar sin tapujos las frustración de millones de jóvenes, a l@s que ni les dejan estudiar ni trabajar, y si les ofrecen algún resquicio en el mercado laboral es para ofrecerles salarios de miseria y contratos basura. Para denunciar la “paz social” que el gobierno, las burocracias de CCOO y UGT y la patronal tienen pactada, mientras el encarecimiento de la vida y la consiguiente devaluación de los salarios hacen estragos en la clase trabajadora, y construir así la oposición de izquierda al gobierno de PSOE- UP.

Ni cacique ni gestores, pon a trabajador@s

Comenzar a revertir la situación actual exige que l@s trabajador@s y los pueblos comencemos a irrumpir como clase en esta situación, interviniendo políticamente con nuestra demandas y recuperando la movilización en defensa de nuestros derechos. Ni siquiera las experiencias aparentemente más a la izquierda, como la de “Kichi”, de Adelante Andalucía, en Cádiz, se han mostrado capaces de sacudirse las presiones de las instituciones y lograr imponer un plan de rescate para la mayoría social de trabajador@s en los sitios donde han gobernado. Es por ello que l@s trabajador@s no podemos seguir delegando en gestores los asuntos que nos afectan directamente en nuestro día a día.

Nuestra Candidatura en Alcalá del Río y Tocina-Los Rosales

En ambos pueblos nuestras candidaturas están conformadas por limpiador@s, barrender@s, metalúrgicos, jornaler@s, trabajadores de la construcción, profesor@s, auxiliares de ayuda a domicilio, etc… Representa un orgullo que poco a poco los de abajo, los que sufrimos la explotación y la opresión, los que no llegamos a final de mes, irrumpamos en este escenario para visualizar la realidad de millones de hogares en este país, y para explicar que no hay progreso ni cambio social, si no es con la movilización ni autoorganización de l@s trabajador@s.