El pasado miércoles 8 de noviembre, en el local de co.bas Madrid tuvo lugar la rueda de prensa de Sindicalistas por la Amnistía total. En ella, participaron algunos de los miembros que han llevado a cabo esta campaña, entre ellos, Pilar León, trabajadora de Rivamadrid, Delegada sindical, miembro de la dirección estatal del sindicato co.bas y militante de Corriente Roja. Reproducimos a continuación su intervención:

Desde co.bas hemos apoyado esta iniciativa de sindicalistas por la Amnistía total, en primer lugar porque nuestro sindicato ha estado y está comprometido en la defensa de las libertades democráticas más elementales, lo que incluye especialmente el derecho de los pueblos a decidir. Por eso hemos venido rechazando la política de persecución al independentismo catalán, a esos más de 4.000 procesad@s.

Pero hablamos de Amnistía total, porque, como dice el manifiesto, son centenares las y los activistas sindicales, luchadoras por la vivienda o artistas que han sido detenid@s, enjuiciad@s y condenad@s por delitos de opinión y estamos convencidas que en unas negociaciones, como las que se llevan a cabo para la investidura de Pedro Sánchez, por las alturas y en el mayor de los secretos, no les queda hueco para acordarse de much@s jóvenes catalanes, de los metalúrgicos de Cádiz, de los de la hostelería de Gijón, o activistas vinculados a la migración encerrados en los CIES.

Somos conscientes que el ambiente que genera las manifestaciones de VOX, PP y toda su tropa reaccionaria echan mas leña a la polarización política ya existente. A nuestro juicio, esa polarización política es el reflejo de la profundización de la crisis social y de la división interburguesa. No es casualidad que el Presidente de la CEOE manifestara hace unos días su rechazo a la Amnistía mientras la Biblia del capitalismo mundial y guía de los inversores, el Financial Times, declaraba el pasado lunes en su editorial su apoyo a la Amnistía por ser “Una apuesta que vale la pena”.

Desgraciadamente, en medio de esa polarización que tiñe la situación, los propagandistas de este sistema se esmeran en afirmar que las clases sociales no existen, existen los “dos “Bloques”, el “progresista”  y el “reaccionario”, en rigor, para nosotras, dos campos burgueses. Tanto las organizaciones políticas mayoritarias de la llamada izquierda, como CCOO y UGT, alientan esa ideología y empujan a la clase obrera a la pasividad, a la resignación y a quedar disuelta entre “la gente”, sin más destino que ser furgón de cola del gobierno burgués de turno.

Por eso esta iniciativa sindical de las firmas por la Amnistía total, tiene para nosotras como principal valor el meter el debate en el activismo obrero, en los sindicatos y centros de trabajo, porque la lucha por el pan, el trabajo, la vivienda o las libertades democráticas básicas, como en este caso, exigen la intervención independiente de la clase obrera, gobierne quien gobierne.

Quisiera concluir señalando que el poder convertir esta iniciativa en movilización en la calle exige antes el poder sumar muchas mas organizaciones sindicales y sociales. Por eso nos gustaría hacer un llamamiento público a organizaciones sindicales como la CGT, LAB, ELA, CIG, o la Intersindical, a sumar esfuerzos para llevar esta batalla a mas empresas y centros de trabajo, porque en esta lucha por una verdadera Amnistía, como en tantas demandas de otros temas, el único bloque que está faltando es el de la clase obrera.

Nada más.